martes, 23 de febrero de 2016

7 razones para visitar El Salvador.

Monumento al divino Salvador del Mundo (Foto: Daniella Martínez)



1. Todo está cerca.


Como ya lo sabes El Salvador es un país muy pequeño, tiene apenas un poco más de 21 mil kilómetros cuadrados, de ahí su apodo “El pulgarcito de América”. Sin embargo, a pesar de su poca extensión territorial nos ofrece una gran variedad de paisajes: playas, volcanes, valles, ciudades modernas, ciudades coloniales, pueblos, ruinas, montañas, lagos, bosques, etc. Sí, todo esto en un reducido espacio, lo cual facilita mucho el acceso y el transporte. No en cualquier país se puede disfrutar del calor de la playa, y luego tomar el bus o el coche, y en 30 minutos estar en un volcán con un suéter puesto, disfrutando de un paisaje y un clima completamente diferentes. Todo esto lo hace un país muy práctico para viajar: Los trayectos serán cortos y el transporte es muy barato.


Ruinas de San Andrés


2. El clima.

Si hay algo de lo que te enamorarás es del clima de El Salvador. Entre 17 y 32 grados centígrados durante todo el año. ¿No te parece agradable? Imagina poder disfrutar del mar y su agua calientita durante todo el año. Ir a comer a una montaña y sentir una briza fresca. Hacer camping con los amigos y sentir un frío agradable. Visitar pueblos llenos de vegetación o sentir el calorcito del oriente del país.
El Salvador posee dos estaciones: la seca (de noviembre a abril) y la lluviosa (de mayo a octubre). Las temperaturas no varían mucho en todo el año. En diciembre y enero el clima es un poco más fresco y en la época lluviosa suele hacer más calor. 


Las Brumas "Volcán de San Salvador"


3. Las playas.

“En el mar la vida es más sabrosa.” 321 kilómetros de costa, esto es lo que nos ofrece este país. Las hermosas aguas del Pacífico. Si practicas el surf definitivamente tienes que visitar estas playas. Las playas de la libertad (Punta Roca, El Sunzal, El Zonte, etc.) son de las mejores a nivel mundial para este deporte extremo.


Surfistas en la Libertad (Foto: Gerardo Grassl)


Si te gusta hacer buceo o snorkeling tienes que visitar la playa Los Cóbanos. Y si lo que quieres es tranquilidad y disfrutar del sol y el mar, te recomiendo las playas del oriente del país: El Espino, El Cuco, Las Tunas, El Tamarindo, etc.


Playa el Cuco en San Miguel.


Hay muchas playas más que no he mencionado, pero en la mayoría encontraras un buen lugar para descansar, así como muy buenos restaurantes con vistas preciosas.
Lo único lamentable de las playas de este país es que la mayoría de lugares turísticos públicos nunca han tenido un buen mantenimiento, así que para tener un buen paisaje a muchas playas hay que llegar por medio de restaurantes, hoteles o alquiler de ranchos privados. Sin embargo hay precios para todos los gustos. 


Playa el Tunco en La Libertad


4. Los volcanes.

¿Alguna vez subiste al cráter de un volcán que hace unos años estuvo en actividad y en cuyo interior hay una laguna verde de agua caliente con azufre? ¿Verdad que no? Si pensabas que eso solo podías verlo en un libro de ciencias naturales, ¡no es así! En El Salvador podrás disfrutar de todo tipo de paisaje volcánico (a lo mejor hasta algún volcán en actividad), quedarás encantado. Toda una cadena volcánica te espera: volcanes grandes, pequeños, con vegetación, desérticos, con restaurantes... Para todos los gustos. 


Volcán Chaparrastique en San Miguel


5. Los lagos.

Siempre he dicho que no hay mejor atardecer que el visto desde un lago. En El Salvador encontraras lagos majestuosos. La mayoría de ellos de origen volcánico. Incluso podrás visitar un lago con azufre y un lago artificial. Paisajes maravillosos, deportes acuáticos, paseos en bote, etc. ¡No te arrepentirás!

El lago de Coatepeque es una maravilla que cada cierto tiempo cambia de color por causa de una alga. Está el lago de Ilopango en el que se practica mucho deporte acuático. El lago de Suchitlán es perfecto para dar paseos en bote y apreciar la fauna y la flora de sus islotes. Y si vas a la frontera te encontrarás el lago de Guija con mucha historia del pasado. Sin olvidar que hay muchas bellas lagunas a lo largo del país.


Lago de Suchitlán


6. La gastronomía.

Toda persona que visita El Salvador debe probar su plato típico por excelencia: “Las Pupusas”. Una deliciosa tortilla de masa de maíz o arroz (ahora hay más tipos de masa como papa y guineo) rellena de queso, tocino, frijoles, loroco, ayote, pollo, espinaca, etc. Hay muchas combinaciones posibles que el cliente puede elegir. Además de las pupusas hay muchísimos platos a base de maíz, a base de yuca, la famosa sopa de pata, los mariscos, y para beber una gran cantidad de deliciosos atoles, refrescos naturales y lo mejor de todo sin lugar a dudas el delicioso café salvadoreño.


Las Pupusas



7. La gente.

El salvadoreño es alegre. Suele llevar siempre una sonrisa en su rostro. Muy amable por lo general, y si eres turista aún más (parte de su curiosidad por otras culturas). Así que te aseguro que te lo pasarás muy bien con los locales. Aunque el salvadoreño siempre viva quejándose de muchas cosas de su país, en el fondo es inmensamente patriótico, ama su tierra, su gente y sus costumbres, así que te aseguro que tratará siempre de transmitirte su cultura y mostrarte todo lo bello que hay en ella. Lo disfrutarás y harás nuevos y buenos amigos.


"La paz comienza con una sonrisa."


domingo, 7 de febrero de 2016

El Mirador de la Giralda

¿A quién no se le antoja un buen café un domingo por la tarde? Bueno, ¡a mí sí! Pero para ser sincero, estoy ya un poco aburrido de los centros comerciales, las paredes y las multitudes. Así que si tú también tienes este mismo sentimiento, quieres salir de la rutina y deseas disfrutar de un delicioso café en la montaña, rodeado de árboles y flores, con una vista preciosa y a pocos minutos de la ciudad; te recomiendo este lugar: "El Mirador de la Giralda".


¡Nada como el café de la tarde!

¿Cómo llegar?

Ya sea que vengas de San Salvador o de Santa Tecla, toma la carretera hacia el puerto de La Libertad. Pasarás delante de dos centros comerciales. El primero se llama La Joya y el segundo se llama Las Palmas. Justamente pasando este segundo centro comercial debes tomar a tu derecha el desvío a Comasagua (hay un rotulo). Esta calle es la que pasa por la ESEN (una universidad). Conduce por esta calle más o menos 15 minutos y antes de llegar a Comasagua a tu derecha verás el restaurante el cual tiene paredes de bambú. 

Por otra parte, si vienes de las playas de La Libertad (por ejemplo del Tunco o del Sunzal) y quieres evitar el horrible tráfico de sábado o domingo por la tarde, te aconsejo tomar la calle hacia Tamanique y allí tomar la calle a Comasagua y así pasas por este café y al mismo tiempo te ahorras mucho tiempo y gasolina.

Para llegar en bus, ve a Santa Tecla una cuadra al sur del gimnasio municipal Adolfo Pineda, y toma el bus 104 hacia Comasagua. No sé con qué frecuencia pasarán los buses, así que infórmate con el conductor para poder regresar a tiempo.


Entrada al restaurante

¿Qué hacer?

El Restaurante ofrece platos fuertes con una tendencia Suiza o Mediterránea, pero para ser sincero el menú no es muy variado. Otra opción es ir a tomar un buen café y el respectivo postre de la tarde. En lo personal, me encanta este lugar más que todo por su hermosa vista. Podría pasar horas en esa terraza, apreciando el paisaje que es muy diferente al de la mayoría de los miradores de San Salvador, ya que en este mirador no ves ninguna ciudad, lo único que ves son volcanes, montañas, y el cielo azul. Qué mejor que un café, una vista fenomenal y una buena compañía. 


Vista desde la terraza del restaurante

Simplemente relájate, llévate un buen libro y disfruta la brisa fresca de este maravilloso lugar. Normalmente escucharás música tranquila de los años 60s y 70s en vivo ya que el propietario canta y toca la guitarra. Y pues tiene muy buena voz y el volumen y sonido es sin duda el adecuado para sentirse en un ambiente agradable.


Un momento de tranquilidad

Te aconsejo que veas el hermoso atardecer desde allí. Sin duda esos 5 minutos de fiesta de colores pincelados por el sol al ocultarse son un espectáculo que vale la pena apreciar.


Un bello atardecer

Y si de repente en la tarde que estás allí, se viene la lluvia o todo el cielo se nubla. ¡No te preocupes! Te aseguro que aun así disfrutarás del paisaje y del viaje.


"Detrás de las nubes, el cielo siempre es azul."

El Restaurante solo está abierto de viernes a domingo de 12:00 m.d. a 8:00 p.m. El precio de un café con un postre anda más o menos por los $6 o $7 y el de un plato fuerte entre $10 y $20.

Consejos:
  • Lleva un suéter y una bufanda. A veces hace frío o mucho viento.
  • Aléjate de la rutina y tómate un buen café lejos de la ciudad.
  • Lleva tu cámara.
  • No te pierdas el atardecer.
  • Disfruta de la naturaleza y de la tranquilidad 
  • Por poco y lo olvido. En el camino para llegar, después de la ESEN hay una cuesta bastante pronunciada y justo arriba hay un túmulo casi imposible de ver (Vaya lugar para poner un túmulo). Lo digo para los que tienen carro un poco bajito.